Sobrecarga muscular: un dolor retardado
La sobrecarga muscular está asociada con el dolor estructural de los elementos contráctiles y se ve reflejada en el dolor muscular de aparición retardada. El dolor muscular, que es un reflejo del dolor estructural, puede darse cuando los músculos esqueléticos son expuestos a un ejercicio inusual.
La sobrecarga muscular también se da en atletas de élite, parece que un alto nivel de forma no protege contra la sobrecarga muscular, especialmente en actividades que implican altos picos de fuerza o contracciones excéntricas.
Algunos autores indican que el ejercicio físico extenuante en un miembro muscular provoca una lesión, especialmente cuando ese ejercicio es intenso, prolongado o incluye contracciones excéntricas. El inicio del evento puede ser resultado de una alta tensión producida por ese músculo, en el cual, ocurre una desorganización en las miofibrillas y/o una perturbación en el medio metabólico. Hay muchos factores que inducen a la lesión muscular durante el ejercicio y es posible, que diferentes tipos de ejercicio (excéntrico, de muchas repeticiones, entre otros factores) puedan provocar diferentes mecanismos de lesión muscular.
La causa del DOMS es desconocida, aunque últimamente, se cree que el DOMS se alcanza por una «Secuencia de Hechos» que ocurren después del ejercicio excéntrico, como son: ruptura de miofibrillas, incremento de la permeabilidad del sarcolema para las proteínas musculares y procesos inflamatorios, con una posterior llegada del DOMS.
Es recomendable realizar un buen calentamiento (link con artículo) para prevenir estas molestias retardadas o minimizarlas y, no lesionarnos.
Dolor muscular retardado
El dolor muscular de inicio retardado es una sensación de malestar, que es más evidente en el músculo esquelético uno o dos días después del ejercicio por lo que es a su vez un complejo de síntomas, dolor en el movimiento, debilidad y una sensación de rigidez e hinchazón de los músculos que realizan un trabajo negativo, por ejemplo, contracciones excéntricas.
Está relacionado con aspectos funcionales y biomecánicos del ejercicio excéntrico, como la Mioglobina (Mb), Creatín Kinasa (CK), ángulo de flexión y ángulo de extensión, aunque su correlación, no es tan importante como aquellas existentes entre los diferentes aspectos mencionados. Como indican otros autores, si los cambios en las fases iniciales del dolor muscular son grandes, los cambios durante fases posteriores del dolor son grandes y viceversa.
Los síntomas suelen aparecer 8-10 horas después del esfuerzo, alcanzando su pico más alto tras 24-48 horas y, decreciendo progresivamente hasta su total extinción después de 3-4 días, únicamente en aquellos grupos musculares implicados en el ejercicio. Sin embargo, otros autores han revelado que el dolor muscular puede aparecer, hasta 5 a 7 días después del ejercicio.
Con respecto a la localización se cree que las áreas de unión músculo-tendinosas, son las principales zonas de dolor y fragilidad. La hipótesis más posible, es que el DOMS comienza por una ruptura de las proteínas estructurales de las fibras musculares y del tejido conectivo asociado, causada por las altas fuerzas mecánicas desarrolladas durante el ejercicio.
El dolor en el sarcolema es acompañado por un influjo neto de Calcio desde el espacio intersticial hasta la fibra, donde la mitocondria acumula el calcio que hace que se inhiba la respiración celular. Consecutivamente, las enzimas proteolíticas son activadas y son las responsables de la degradación de los componentes estructurales de los elementos contráctiles. El progresivo deterioro del sarcolema es acompañado por una difusión de componentes intracelulares en el intersticio y el plasma, donde atrae monocitos que se convierten en macrófagos en las áreas de lesión. Los procesos de fagocitosis y necrosis celular producen una acumulación intersticial de Histamina, Kinina y Potasio, que activan los receptores nocivos. Esta compleja serie de acontecimientos podría producir el DOMS, así como la liberación de enzimas de las células dañadas.
Mecanismos productores
- Factores Mecánicos: Evidencias experimentales sugieren que el estrés mecánico es un factor dominante en la producción del dolor muscular durante el ejercicio inducido. Un soporte para esta afirmación es que el dolor inicial tiene lugar en el aparato contráctil. Otro argumento a favor de los factores mecánicos es la observación de que el dolor muscular se produce mucho más pronto en contracciones excéntricas que en las concéntricas. En el ejercicio excéntrico se recluta un número de unidades motoras más bajo comparado con el mismo ejercicio concéntrico. Esto implica que, en el ejercicio excéntrico, el estrés mecánico por fibra es más alto que en el ejercicio concéntrico.
El dolor en los elementos contráctiles después del trabajo excéntrico se ve reflejado en la pérdida de fuerza durante varios días y la rigidez es debida al dolor en el tejido conectivo, incluyendo el edema tisular, el cual causa un incremento en la sensibilidad mecánica de los receptores musculares. Debido al aumento de esta sensibilidad, el dolor se incrementa cuando dichos receptores son activados por presión o estiramiento del músculo.
- Alteración de la Micro-Circulación: Se ha sugerido que la micro-circulación también contribuye a los cambios locales. Se ha barajado la hipótesis de que la inflamación de las fibras musculares durante la actividad conlleva un incremento de la presión del tejido y una alteración de la micro-circulación.
- Factores Metabólicos: Debido a las similares características en el dolor estructural que pueden ser observadas tras una isquemia, en pacientes con defectos metabólicos, es posible que estos factores contribuyan a la producción del dolor muscular. Debido a que las miopatías metabólicas conllevan un deterioro en la capacidad de generar ATP, es posible que esa disminución en la regeneración de ATP, pueda incrementar la vulnerabilidad mecánica que se asocia además a la acción de las Prostaglandinas.
Indicadores
Algunos de los indicadores del dolor muscular son: la elevación de la [CK] y de la [Mb], disminución en la fuerza de contracción máxima voluntaria y disminución de la fatiga de baja frecuencia. Mientras que la CK comienza a aumentar lentamente después de las 24 horas, alcanzando su máximo 3-4 días después de un ejercicio excéntrico, la Mb muestra un incremento inicial una hora después del ejercicio excéntrico, pero muestra incluso mayores incrementos después 24 horas. La fuerza disminuye y el ángulo de flexión aumenta, mostrando su mayor cambio una hora después del ejercicio excéntrico, mientras que el ángulo de extensión continúa disminuyendo hasta las 48 horas.